Hay que instruir a la juventud riendo; reprender sus vicios con dulzura y no asustarla con el nombre de la virtud.
De mis disparates de juventud, lo que me da más pena no es haberlos cometido, sino no poder volver a cometerlos.
La inexperiencia es lo que permite a la juventud llevar a cabo lo que la vejez sabe que es de imposible realización.
El problema de la juventud de hoy es que ya no forma uno parte de ella.
La juventud no es un tiempo de la vida, es un estado del espíritu.
Si no somos corresponsables del pasado, tampoco tendremos derecho a reclamarnos legítimos propietarios del futuro.
La envidia es el más sociable de los vicios. Proviene de nuestro carácter de animales gregarios.
Mi sueño es el de Picasso; tener mucho dinero para vivir tranquilo como los pobres.
El aburrimiento es la explicación principal de por qué la historia está tan llena de atrocidad.
Uno no puede hacer nada por las personas que ama, sólo seguir amándolas.