El reloj es el grillete del tiempo.
Matan los médicos y viven de matar, y la queja cae sobre la dolencia.
Ya que las ciencias particulares dejan sin tratar algunas cosas que necesitan investigación, se hace necesaria la existencia de una ciencia universal y primera que estudie esas cuestiones de las que no se ocupan las ciencias particulares
La medicina, pues, no busca lo conveniente para sí misma, sino para el cuerpo
La ciencia será siempre una búsqueda, jamás un descubrimiento real. Es un viaje, nunca una llegada
El verdadero amor no es otra cosa que el deseo inevitable de ayudar al otro para que sea quien es.
La felicidad es la certeza de no sentirse perdido.
Porque nadie puede saber por ti. Nadie puede crecer por ti. Nadie puede buscar por ti. Nadie puede hacer por ti lo que tú mismo debes hacer. La existencia no admite representantes.
Sólo si me siento valioso por ser como soy, puedo aceptarme, puedo ser auténtico, puedo ser verdadero.
No hay que morir por el otro, sino vivir para disfrutar juntos.