Una gran miseria en los hombres es que sepan tan bien lo que les es debido y que sientan tan poco lo que deben a los otros.
Nuestro deber es ser útiles, pero no como quisiéramos, sino como podamos.
Tener un hijo no es tener un ramo de rosas.
¿Has cumplido con tu deber? Confía en el Cielo que no te abandonará.
El primero de nuestros deberes es poner en claro cuál es nuestra idea del deber.
Al hombre que hace todo lo que puede no podemos decirle que no hace todo lo que debe.
El buen juez no ha de torcer las leyes a su condición, sino torcer su condición conforme a las leyes.
El aconsejar es un oficio tan común que lo usan muchos y lo saben hacer muy pocos.
Lo que al caballero le hace ser caballero es ser medido en el hablar, largo en el dar, sobrio en el comer, honesto en el vivir, tierno en el perdonar y animoso en el pelear
A los cordiales amigos no basta alumbrarles por do vayan, sino que les hemos de quitar tropiezos a do tropiecen