Educar no es dar carrera para vivir, sino templar el alma para las dificultades de la vida.
Hay estudiantes que no aprenden a distinguir lo que es importante sino hasta mucho después de haber dejado la escuela.
Los hombres inteligentes quieren aprender, los demás, enseñar.
Nunca consideres el estudio como un deber, sino como una oportunidad para penetrar en el maravilloso mundo del saber.
La mayoria de los delicuentes son personas sin calificación social y provenientes de familias desunidas (85% de los casos). Ello muestra la enorme importancia que tiene la educación y un ambiente familiar estable para la vida del individuo.
En la bondad se encierran todos los géneros de sabiduría.
Y entonces, habiendo sido privados de la cercanía de un abrazo o de una mesa compartida, nos quedarán “los medios de comunicación”.
La Historia no es mecánica porque los hombres son libres para transformarla.
Ser original es en cierto modo estar poniendo de manifiesto la mediocridad de los demás.
La vanidad es tan fantástica, que hasta nos induce a preocuparnos de lo que pensarán de nosotros una vez muertos y enterrados.