Aprecio al dinero más que a todas aquellas cosas que el dinero puede dar, pero menos que a las cosas que no podrán nunca alcanzarse con el dinero y que son las más excelentes aun en esta misera vida.
Una recta economía nunca se olvida de que no siempre es posible ahorrar; quien pretende economizar siempre, está perdido aun moralmente.
Gastamos dinero que no tenemos, en cosas que no necesitamos, para impresionar a gente a la que no le importamos.
El dinero lo ganan todos aquellos que, con paciencia y fina observación, van detrás de los que lo pierden.
Somos gente extraña. Nos pasamos la vida haciendo cosas que detestamos con objeto de ganar dinero para comprar cosas que no necesitamos e impresionar a personas que no nos caen bien.
No me extrañaría que pronto nos endilgaran una película con el mensaje de que en una guerra nuclear la humanidad fue barrida de este mundo, pero, al final, todo acabó muy bien
Cuando se tiene que esperar, se tiene que esperar
A mi perecer, ciertos sistemas de pensamiento son tan parciales y tan simples que se vuelven irrebatibles
Hay personas que pueden herir a otras, sólo por el mero hecho de existir
¿Acaso no existe en mi cuerpo una especie de limbo de la memoria donde todos los recuerdos cruciales van acumulándose y convirtiéndose en lodo?