Quien siempre dice la verdad, puede permitirse tener mala memoria.
Si dudo, si me alucino, vivo. Si me engaño, existo. ¿Cómo engañarme al afirmar que existo, si tengo que existir para engañarme?
Sería necesario imponer esta regla: no repetir jamás una afirmación malévola sin verificar su contenido. Aunque es cierto que así nunca se hablaría de nada.
Un chisme es como una avispa; si no puedes matarla al primer golpe, mejor no te metas con ella.
Un buen mentiroso sabe que la mentira más efectiva es siempre una verdad a la que se le ha sustraído una pieza clave
La historia me absolverá
Y si alguna de las cosas que decimos las explota el enemigo y nos producen profunda vergüenza, ¡¡bienvenida sea la vergüenza!!... ¡¡bienvenida sea la pena!!, si sabemos convertir la vergüenza en fuerza, si sabemos convertir la vergüenza en espíritu de trabajo, si sabemos convertir la vergüenza en dignidad, si sabemos convertir la vergüenza en moral
Si salgo llego, si llego entro, si entro triunfo
Las ideas no necesitan ni de las armas, en la medida en que sean capaces de conquistar a las grandes masas
Nos acompaña la convicción más profunda de que las ideas pueden más que las armas por sofisticadas y poderosas que éstas sean