Cada vez iré sintiendo menos y recordando más
Por muy lejos que el espíritu vaya, nunca irá más lejos que el corazón
Cuando los ojos ven lo que nunca vieron, el corazón siente lo que nunca sintió
Yo podría estar encerrado en una cáscara de nuez y sentirme rey de un espacio infinito
No sé tu nombre, sólo sé la mirada con que me lo dices
Escribir para niños es un don, como la poesía, que no está al alcance de cualquiera.
Para el que no tiene nada, la política es una tentación comprensible, porque es una manera de vivir con bastante facilidad.
Al palpar la cercanía de la muerte, vuelves los ojos a tu interior y no encuentras más que banalidad, porque los vivos, comparados con los muertos, resultamos insoportablemente banales.
No existe la felicidad. A lo largo de la vida hay briznas de dicha que se deshacen como pompas de jabón.
La máquina ha venido a calentar el estómago del hombre pero ha enfriado su corazón.