Educar no es dar carrera para vivir, sino templar el alma para las dificultades de la vida.
Hay estudiantes que no aprenden a distinguir lo que es importante sino hasta mucho después de haber dejado la escuela.
Los hombres inteligentes quieren aprender, los demás, enseñar.
Nunca consideres el estudio como un deber, sino como una oportunidad para penetrar en el maravilloso mundo del saber.
Lo he dicho en otras oportunidades y lo reafirmo: la búsqueda de una vida más humana debe comenzar por la educación.
El lenguaje es lo más intrascendente, superficial e inestable, y su encanto se desvanece por completo cuando se advierte la intención en su manejo.
Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años y son muy buenos. Pero hay los que luchan toda la vida. Esos son los imprescindibles.
Muchos jueces son incorruptibles, nadie puede inducirlos a hacer justicia.
Las revoluciones se producen en los callejones sin salida.
Desgraciado el país que necesita héroes.