Una triple bendición son nuestros amigos: vienen, se quedan y se van.
El amigo debe ser como la sangre, que acude a la herida sin esperar que lo llamen.
Si quieres hallar en cualquier lado amistad, dulzura y poesía, llévalas contigo.
De ningun bien se goza en la posesión, sin un compañero.
En la prosperidad nuestros amigos nos conocen; en la adversidad los conocemos a ellos.
Nadie puede hacerte sentir inferior sin tu consentimiento.
El futuro pertenece a quienes creen en la belleza de sus sueños.
No basta con hablar de paz. Uno debe creer en ella y trabajar para conseguirla.
Lo más importante en cualquier relación no es lo que obtienes, sino lo que das
Con la libertad viene la responsabilidad. Para la persona que no está dispuesta a crecer, la persona que no quiere llevar su propio peso, esta es una perspectiva aterradora