Nuestra felicidad se hace a veces con las cosas que desdeñamos.
Todas las familias felices se parecen entre si, las infelices son desgracias en su propia manera.
La falsa felicidad vuelve duros y soberbios a los hombres, y no se comunica a otros. La felicidad verdadera los torna dulces y sensibles, y halla siempre manera de hacer nuevos participantes de ella.
Es menester, en cuanto esto sea posible, que fundamentéis la felicidad en vosotros mismos, y que encontréis en vuestro ser el equivalente de los bienes que la fortuna os ha rehusado.
Si nos bastase con ser felices, pronto lo conseguiríamos; pero queremos ser más felices que los demás, y ello es muy difícil, tanto más cuanto que consideramos a aquéllos mucho más felices de lo que en realidad son.
Puedes decir cosas un millón de veces, pero si no puedes cantar, entonces realmente no hay mucho de una canción
Cuando estoy en el estudio, no hay límites
No hay nada malo en disparar a las estrellas
Esto no es por dinero. Esto es sólo para mí. Me gusta la música
Lo peor de ser famoso es la invasión de tu privacidad