Al que mal vive, el miedo le sigue.
Los hombres tiene miedo de la muerte, los niños temen la oscuridad.
Todo pensador profundo tiene más miedo a ser entendido que a ser malentendido.
Tiraríamos muchas cosas, si no tuviéramos miedo de que otros las recogieran.
Tener miedo a enfrentarse a un hecho es temer que lo peor es verdad.
Felicidad no es hacer lo que uno quiere sino querer lo que uno hace.
Cuando los ricos se hacen la guerra, son los pobres los que mueren.
El hombre nace libre, responsable y sin excusas.
Basta con que un hombre odie a otro para que el odio vaya corriendo hasta la humanidad entera.
Como todos los soñadores, confundí el desencanto con la verdad.