La economía como esencia de la vida es una enfermedad mortal, porque un crecimiento infinito no armoniza con un mundo finito.
Todo impuesto debe salir de lo superfluo, y no de lo necesario.
Economía no es avaricia, antes bien, es virtud el guardar para los tiempos calamitosos, aun cuando no sea sino en consideración a los herederos
Creo que el ahorro es esencial para una buena vida
La inflación es la madre del paro, y la ladrona invisible de los que han ahorrado
Me preocupa también enormemente la desconfianza que parece estar extendiéndose sobre la credibilidad y prestigio de algunas de nuestras instituciones
Sobre todo las personas con responsabilidades públicas, tenemos el deber de observar un comportamiento adecuado, un comportamiento ejemplar
La justicia es igual para todos. Cualquier actuación censurable deberá ser juzgada y sancionada con arreglo a la ley
No se deben generalizar los comportamientos individuales porque se podría causar un grave daño a instituciones y organizaciones que son necesarias para la vertebración de nuestra sociedad
Es moralmente inasumible para un país vertebrado, moderno y solidario como el nuestro la elevada tasa de desempleo