Cuando los hombres son puros, las leyes son inútiles. Cuando los hombres son corruptos, las leyes son rotas.
Cuando advierta que para producir necesita obtener autorización de quienes no producen nada; cuando compruebe que el dinero fluye hacia quienes trafican, no bienes, sino favores; cuando perciba que muchos se hacen ricos por el soborno y por influencias más que por el trabajo, y que las leyes no lo protegen contra ellos sino, por el contrario, son ellos los que están protegidos contra usted; cuando repare que la corrupción es recompensada y la honradez se convierte en un autosacrificio, entonces podrá afirmar, sin temor a equivocarse, que su sociedad está condenada.
Sean capaces de sentir en lo más profundo cualquier injusticia, cometida contra cualquiera en cualquier parte del mundo, pués es la cualidad más linda de un revolucionario.
El talento puede dar prestigio, el valor puede dar soldados, la tiranía puede dar esclavos, pero sólo la justicia puede dar la fuerza.
Juzga a un hombre cuando te hayas puesto en su lugar.
Me preocupa también enormemente la desconfianza que parece estar extendiéndose sobre la credibilidad y prestigio de algunas de nuestras instituciones
Sobre todo las personas con responsabilidades públicas, tenemos el deber de observar un comportamiento adecuado, un comportamiento ejemplar
La justicia es igual para todos. Cualquier actuación censurable deberá ser juzgada y sancionada con arreglo a la ley
No se deben generalizar los comportamientos individuales porque se podría causar un grave daño a instituciones y organizaciones que son necesarias para la vertebración de nuestra sociedad
Es moralmente inasumible para un país vertebrado, moderno y solidario como el nuestro la elevada tasa de desempleo