Educar es formar personas aptas para gobernarse a sí mismas, y no para ser gobernadas por otros
Ni español ni extranjero, ni blanco ni negro, ni mujer ni varón. Soy yo sin etiquetas, que es lo contrario del ego. Toda mi vida he luchado por destrozar el ego para que emerja el yo profundo. Ulises dijo al cíclope: “Yo soy nadie. Un hombre sin etiquetas”. Yo también lo soy. Hace años leí en El manantial, de Ayn Rand, una frase que me impresionó: Para decir yo te amo, primero hay que aprender a decir yo
Si la propiedad naciera con la ley, el estado no roba, porque mediante su ley generaría la propiedad. Así es impune y tiene todo el poder
La gente ya está empezando a darse cuenta de que el Estado es demasiado costoso. Lo que aún no terminan de comprender es que el peso de ese coste recae sobre ellos
A menudo, las masas son saqueados y no lo saben
En este mundo no hay más que dos, y sólo dos, maneras de establecer cuáles han de ser los precios de los bienes. Una es el camino del mercado libre, en el que los precios son establecidos en forma voluntaria por cada uno de los individuos que participan en el mercado. En esta situación, los intercambios se realizan en términos de beneficio para todos los que intercambian. El otro camino es la intervención violenta en el mercado, la vía hegemónica en oposición a la contractual. Tal establecimiento hegemónico de los precios significa la exclusión de los intercambios libres y la institución de la explotación del hombre por el hombre, ya que hay explotación siempre que se efectúa un intercambio sujeto a coerción
¿Es posible tener códigos tan estables y consistentes cuando sólo hay jueces que compiten entre sí para desarrollarlos y aplicarlos, y no existe un gobierno y una legislatura? No sólo son posibles, sino que a lo largo de los años las mejores y más exitosas partes de nuestro sistema legal se desarrollaron precisamente de esta manera. Las legislaturas, al igual que los reyes, fueron arbitrarias, invasivas e incoherentes. Todo cuanto hicieron fue introducir anomalías y despotismo en el sistema jurídico. En realidad, el gobierno no está más calificado para desarrollar y aplicar la ley que para proveer cualquier otro servicio; y así como se separó la religión del Estado, y la economía puede separarse de él, lo mismo puede hacerse con cualquier otra función estatal, incluyendo la policía, los tribunales y la ley misma
Durante siglos el Estado ha cometido ASESINATOS en masa y los ha llamado guerra; ennobleciendo la masacre en masa que la guerra implica. Durante siglos el Estado ha ESCLAVIZADO a la gente en sus batallones armados y lo ha llamado servicio militar al servicio nacional. Durante siglos el Estado ha ROBADO a la gente a punta de bayoneta y lo ha llamado impuestos
Empíricamente, y tomando al siglo XX en su totalidad, el gobierno más belicoso, más intervencionista, más imperialista ha sido el de los Estados Unidos
Finalmente está el hecho de que las personalidades únicas necesitan libertad para su completo desarrollo, que constituye uno de los principales argumentos a favor de una sociedad libre