No me siento obligado a creer que un dios que nos ha dotado de inteligencia, sentido común y raciocinio, tuviera como objetivo privarnos de su uso.
Sólo conozco dos tipos de personas razonables: las que aman a Dios de todo corazón porque le conocen, y las que le buscan de todo corazón porque no le conocen.
¿Es el hombre sólo un fallo de Dios, o Dios sólo un fallo del hombre?
Nosotros debemos nuestra vida a dios, por eso si se la pagamos hoy, no se la deberemos mañana.
Dios es día y noche, invierno y verano, guerra y paz, abundancia y hambre.
La humanidad progresa. Hoy solamente queman mis libros; siglos atrás me hubieran quemado a mi.
No me cabe concebir ninguna necesidad tan importante durante la infancia de una persona que la necesidad de sentirse protegido por un padre.
La ciencia moderna aún no ha producido un medicamento tranquilizador tan eficaz como lo son unas pocas palabras bondadosas.
Los sentimientos de amor y temor de Dios no tienen su origen en Dios, si no en los seres humanos. Son sentimientos de frustración dirigidos por el hombre a un ser imaginario que pretende sea su padre.
Todo lo que trabaja para el desarrollo de la cultura trabaja también contra la guerra.