El ojo recibe de la belleza pintada el mismo placer que de la belleza real.
La belleza complace los ojos; la dulzura encadena el alma.
Cada cosa tiene su belleza, pero no todos pueden verla.
La belleza es ese misterio hermoso que no descifran ni la psicología ni la retórica.
¿No ves tú que, entre las humanas bellezas, un bellísimo rostro detiene a los transeúntes mejor que las riquezas que lo encuadran?
Cuanto más alto estamos, más debemos bajarnos hacia nuestros inferiores.
De ningun bien se goza en la posesión, sin un compañero.
Si buscas el amigo perfecto, morirás sin conocer la amistad.
La naturaleza quiere que la amistad sea auxiliadora de virtudes, mas no compañera de vicios.
Cuanto más honrado es un hombre más le cuesta sospechar que los otros no lo sean.