No se desprecia a todos los que tienen vicios; pero se desprecia a todos los que no tienen ninguna virtud.
La virtud es el punto medio entre dos vicios opuestos.
Yo honro con el nombre de la virtud a la costumbre de realizar acciones penosas y útiles de los démas.
Una de las principales virtudes sociales es la de tolerar en los demás lo que nos prohibimos a nosotros mismos.
El virtuoso se conforma con soñar lo que el pecador realiza en la vida.
El esclavo sólo tiene un dueño; el ambicioso, tantos como personas le pueden ser útiles a su fortuna.
Conviene reír sin esperar a ser dichoso, no sea que nos sorprenda la muerte sin haber reído.
La muerte no llega más que una vez, pero se hace sentir en todos los momentos de la vida.
Frecuentemente es más breve y más útil adaptarse a los otros que hacer que los demás se ajusten a nosotros.
Es más fácil encontrar un amor apasionado que una amistad perfecta.