En los pequeños detalles y cuando está desprevenido es cuando el hombre pone mejor de manifiesto su carácter.
El carácter es una voluntad fuerte dirigida por una conciencia tierna.
El verdadero carácter siempre aparece en las grandes circunstancias.
Nuestro carácter es el resultado de nuestra conducta.
Se denomina "carácter" al hombre que tiene algunas opiniones e ideas propias, pero que no vive de acuerdo con ellas. Sólo de cuando en cuando deja finamente vislumbrar que piensa de otra manera, que tiene opiniones propias.
Uno de los grandes secretos del trato con los hombres consiste, para los inteligentes, en fingir menos inteligencia de la que tienen, y para los tontos en fingir más. Pero ambas cosas son harto difíciles.
No seas desproporcionado en tus ambiciones. Pretende sólo aquello que puedas obtener con toda seguridad. Sitúate sólidamente en el puesto que te corresponde. Una persona en un puesto superior a su capacidad es un espectáculo deplorable.
El hombre que a los veinte años no cree en la mujer, no tiene corazón; y el que sigue creyendo en ella a los cuarenta, no tiene entendimiento.
Política es el arte de obtener dinero de los ricos y votos de los pobres con el fin de proteger a los unos y a los otros.
Es muy importante acostumbrarse a pedir aclaraciones al otro, a preguntarle detalles, a invitarle a definir sus tesis con precisión. Así, a la vez que se aprende a escuchar se ayuda a pensar al otro.