La soledad es el imperio de la conciencia.
La soledad es el elemento de los grandes talentos.
Una persona puede sentirse sola, aún cuando mucha gente la quiera.
La soledad es necesaria para gozar de nuestro propio corazón y para amar; pero para triunfar en la vida es preciso dar algo de nuestra vida al mayor número posible de gentes.
El ser humano puede soportar una semana de sed, dos semanas de hambre, muchos años sin techo, pero no puede soportar la soledad.
El conocer lo que tenemos delante de nosotros, en nuestra vida ordinaria, ésa es la principal sabiduría.
El sufrimiento purifica. Aquel que sepa sufrir mejor, hará mejor obra.
La soledad es a veces la mejor compañía, y un corto retiro trae un dulce retorno.
No cabe duda que la gente tiene que estar loca o extrañamente obcecada para cifrar la principal esperanza de su fidelidad o seguridad común en una sola persona, la cual, en el caso de que sea buena, no puede hacer más que otro hombre, y si es mala tiene poder para hacer más daño que millones de otros hombres
La soledad a veces es la mejor compañía