Unos tienen ingenio para hacer cosas bellas, otros para dar a entender que las cosas que hacen son bellas. Son dos ingenios diversos, pero ambos eficaces.
El ingenio consiste en apreciar el parecido de cosas que difieren entre sí, y la diferencia de cosas entre sí iguales.
El ingenio es la insolencia educada.
El tonto tiene una gran ventaja sobre el hombre de ingenio: a diferencia de éste, siempre está contento de sí mismo.
¿De que sirve el ingenio cuando no nos divierte? No hay nada más fatigoso que un ingenio triste.
La memoria es el diario en el que se consignan cosas que nunca han ocurrido ni hubieran podido ocurrir.
Tiraríamos muchas cosas, si no tuviéramos miedo de que otros las recogieran.
Hay solamente una cosa en el mundo peor que hablen de ti, y es que no hablen de ti.
No voy a dejar de hablarle sólo porque no me esté escuchando. Me gusta escucharme a mí mismo. Es uno de mis mayores placeres. A menudo mantengo largas conversaciones conmigo mismo, y soy tan inteligente que a veces no entiendo ni una palabra de lo que digo.
Ultimamente se han escrito varias obras de teatro sobre la monstruosa injusticia que supone el actual código de moral social. Por supuesto que es una vergüenza insultante que haya una ley para el hombre y otra para la mujer. Yo creo que no debería haber ley alguna para ninguno de los dos.