Una buena conversación debe agotar el tema, no a sus interlocutores.
Las conversaciones siempre son peligrosas si se quiere esconder alguna cosa.
La buena conversación no consiste en decir cosas ingeniosas, sino en saber escuchar tonterías.
Ella había perdido el arte de la conversación, pero no la capacidad de hablar.
Cuando los hombres son puros, las leyes son inútiles. Cuando los hombres son corruptos, las leyes son rotas.
La sabiduría de los sabios y la experiencia de los siglos pueden condensarse con las citas.
La magia del primer amor consiste en nuestra ignorancia de que pueda tener fin.
Lo mejor que podemos hacer por otro no es sólo compartir con él nuestras riquezas, sino mostrarle las suyas.
Hay personas silenciosas que son mucho más interesantes que los mejores oradores.