A todo hombre le es concedido conocerse a sí mismo y meditar sabiamente.
Pensar es como vivir dos veces.
El sabio no se sienta para lamentarse, sino que se pone alegremente a su tarea de reparar el daño hecho.
Saber que se sabe lo que se sabe y que no se sabe lo que no se sabe; he aquí el verdadero saber.
Lo que sabemos es una gota de agua, lo que ignoramos es el océano.
La formulación de un problema, es más importante que su solución.
La ley de la gravedad no es responsable de que la gente se enamore.
Lo más incomprensible del universo, es que sea comprensible.
Si supiese qué es lo que estoy haciendo, no le llamaría investigación, ¿verdad?.
Cuando las leyes de la matemática se refieren a la realidad, no son ciertas; cuando son ciertas, no se refieren a la realidad.