Sepan los jovenes que dado el gran número y variedad de pecados que por todas partes nos acechan, requiere más discrección y constancia evitar el mal, que mantenerse en el bien.
Hay mucha gente que piensa que el domingo es una esponja que limpia los pecados de toda la semana.
La mayoría de los pecadores pasan su vida ofendiendo a Dios y confesándose.
¡Qué pena que beber agua no sea un pecado! ¡Qué bien sabría entonces!
Dios lo que más odia después del pecado es la tristeza, porque nos predispone al pecado.
La amistad es fuente de grandes placeres, sin amigos hasta lo más agradable se vuelve tedioso.
Es mucho más hermoso iluminar que simplemente brillar; de la misma manera es más hermoso transmitir a los demás lo que se ha contemplado que sólo contemplar.
La fe se refiere a cosas que no se ven, y la esperanza, a cosas que no están al alcance de la mano.
Teme al hombre de un solo libro.
Dios, que es acto puro y no tiene nada de potencialidad, tiene un poder activo infinito sobre las demás cosas.