Todo error deja una enseñanza, toda enseñanza deja una experiencia y toda experiencia deja una huella.
Siempre que enseñes, enseña a la vez a dudar de lo que enseñas.
Para enseñar a los demás, primero has de hacer tú algo muy duro: has de enderezarte a ti mismo.
La mayor parte de la gente confunde la educación con instrucción.
Los años enseñan muchas cosas que los días jamás llegan a conocer.
La belleza vale más que cualquier carta de recomendación.
Las virtudes más grandes son aquellas que más utilidad reportan a otras personas.
Nuestro carácter es el resultado de nuestra conducta.
La felicidad reside en el ocio del espíritu.
El hombre es por naturaleza un animal político.