Cuando se sugieren muchos remedios para un solo mal, quiere decir que no se puede curar.
Aunque apenas pueda resistir mis males, prefiero padecerlos a merecerlos.
Para toda clase de males hay dos remedios; el tiempo y el silencio.
Debemos buscar para nuestros males otra causa que no sea Dios.
Si eliges entre el menor de dos males, al final del día, sigues teniendo mal.
Quien no quiere pensar es un fanático; quien no puede pensar, es un idiota; quien no osa pensar es un cobarde.
Si comienza uno con certezas, terminará con dudas; mas si se acepta empezar con dudas, llegará a terminar con certezas.
Vengándose, uno se iguala a su enemigo; perdonándolo, se muestra superior a él.
No hay cosa que haga más daño a una nación como el que la gente astuta pase por inteligente.
Vieja madera para arder, viejo vino para beber, viejos amigos en quien confiar, y viejos autores para leer.