Si no peleas para acabar con la corrupción y la podredumbre acabarás formando parte de ella.
Los hombres son pervertidos no tanto por la riqueza como por el afán de riqueza.
Lo último corrompido ¿no es el principio de lo engendrado?
Si no peleas para acabar con la corrupción y la podredumbre, acabarás formando parte de ella.
Todo hombre tiene su precio, lo que hace falta es saber cual es.
El lenguaje es lo más intrascendente, superficial e inestable, y su encanto se desvanece por completo cuando se advierte la intención en su manejo.
Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años y son muy buenos. Pero hay los que luchan toda la vida. Esos son los imprescindibles.
Las revoluciones se producen en los callejones sin salida.
Desgraciado el país que necesita héroes.
Cuando el delito se multiplica, nadie quiere verlo.