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Tener con quien llorar aminora el llanto de muchos.
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Fue el tiempo que pasaste con tu rosa lo que la hizo tan importante.
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Debemos buscar a alguien con quien comer y beber antes de buscar algo que comer y beber, pues comer solo es llevar la vida de un león o un lobo.
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No frecuentes las malas compañías, no sea que aumente su número.
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Triste puedo estar solo: para estar alegre, necesito compañía.