Los libros han ganado más batallas que las armas.
Para viajar lejos, no hay mejor nave que un libro.
Los libros sólo tienen valor cuando conducen a la vida y le son útiles.
Es un buen libro aquel que se abre con expectación y se cierra con provecho.
Los libros son compañeros, maestros, magos y banqueros de los tesoros de la mente.
Luchar contra nuestro destino sería un combate como el del manojo de espigas que quisiera resistirse a la hoz.
El amor hallará su camino, aunque sea a través de senderos por donde ni los lobos se aventurarían a seguir a su presa.
El arte, la gloria, la libertad se marchitan, pero la naturaleza siempre permanece bella.
El hombre es un péndulo entre la sonrisa y el llanto.
Cuando la edad enfría la sangre y los placeres son cosa del pasado, el recuerdo más querido sigue siendo el último, y nuestra evocación más dulce, la del primer beso.