Aprecio al dinero más que a todas aquellas cosas que el dinero puede dar, pero menos que a las cosas que no podrán nunca alcanzarse con el dinero y que son las más excelentes aun en esta misera vida.
Una recta economía nunca se olvida de que no siempre es posible ahorrar; quien pretende economizar siempre, está perdido aun moralmente.
Gastamos dinero que no tenemos, en cosas que no necesitamos, para impresionar a gente a la que no le importamos.
El dinero lo ganan todos aquellos que, con paciencia y fina observación, van detrás de los que lo pierden.
Somos gente extraña. Nos pasamos la vida haciendo cosas que detestamos con objeto de ganar dinero para comprar cosas que no necesitamos e impresionar a personas que no nos caen bien.
Lo más razonable que se ha dicho sobre el matrimonio y sobre el celibato es esto: hagas lo que hagas te arrepentirás.
Cásate con un arqueólogo. Cuanto más vieja te hagas, más encantadora te encontrará.
Cuando no hay humildad, las personas se degradan.
Las conversaciones siempre son peligrosas si se quiere esconder alguna cosa.
Aprendí que no se puede dar marcha atrás, que la esencia de la vida es ir hacia adelante. La vida, en realidad, es una calle de sentido único.