Presta solamente aquello cuya pérdida puedas soportar.

Los hombres intentan purificarse manchándose de sangre. Es como si, después de haberse manchado con barro, quisieran limpiarse con barro.

En el círculo se confunden el principio y el fin.

El sol es nuevo cada día.

Son distintas la aguas que cubren a los que entran al mismo río.

Quédate siempre detrás del hombre que dispara y delante del hombre que está cagando. Así estás a salvo de las balas y de la mierda.

El que no encuentra un biógrafo ha de forjarse la vida él mismo.

El soldado bisoño lo cree todo perdido desde que es derrotado una vez.

El ajedrez es un juego útil y honesto, indispensable en la educación de la juventud.

Primero el suelo nativo que nada. Nuestra vida no es otra cosa que la herencia de nuestro país.