El primer trago da salud, el segundo placer, el tercero vergüenza, y el cuarto locura.
Lo más escandaloso que tiene el escándalo es que uno se acostumbra.
El pudor es la epidermis del alma.
El pudor es una virtud relativa, según se tengan veinte, treinta o cuarenta y cinco años.
Cuando un hombre estúpido hace algo que le avergüenza, siempre dice que cumple con su deber.
Los países libres son aquellos en los que son respetados los derechos del hombre y donde las leyes, por consiguiente, son justas.
La muerte es el comienzo de la inmortalidad.
Nadie puede elevarse por encima de los límites de su carácter
Almas de fango, que no estimais mas que el oro, no quiero tocar vuestros tesoros, por impuro que sea su origen
Lástima es traición a la patria