Sé pacífico; no vengarse puede ser también una forma de venganza.
Vengándose, uno se iguala a su enemigo; perdonándolo, se muestra superior a él.
Una persona que quiere venganza guarda sus heridas abiertas.
Yo no hablo de venganzas ni perdones, el olvido es la única venganza y el único perdón.
La venganza es el manjar más sabroso condimentado en el infierno.
La persona que no se interesa por sus semejantes es la que tiene mayores dificultades en la vida y causa las mayores heridas en los demás. De esos individuos surgen todos los fracasos humanos.
Cuando tenemos una idea brillante, en lugar que hacer que el prójimo piense que es nuestra, ¿por qué no dejarle que prepare esta idea por sí mismo? Entonces considerará que la idea es suya, le gustará y será el primero en defenderla.
Acepta los riesgos, toda la vida no es sino una oportunidad. El hombre que llega más lejos es, generalmente, el que quiere y se atreve a serlo.
Encuéntrate y sé tú mismo; recuerda que no hay nadie como tú.
Hoy es el mañana por el que te preocupabas ayer.