El primer trago da salud, el segundo placer, el tercero vergüenza, y el cuarto locura.
Lo más escandaloso que tiene el escándalo es que uno se acostumbra.
El pudor es la epidermis del alma.
El pudor es una virtud relativa, según se tengan veinte, treinta o cuarenta y cinco años.
Cuando un hombre estúpido hace algo que le avergüenza, siempre dice que cumple con su deber.
Los negocios de la humanidad nos inspira los corazones de los hombres nobles de dos maneras: admiración o lastima.
En las matemáticas es donde el espíritu encuentra los elementos que más ansía: la continuidad y la perseverancia.
Los hombres de acción no tienen vida interior y, por lo mismo, no son desgraciados. Nunca es el acontecimiento exterior contrario lo que hace desgraciados a los hombres, sino el alma en pena que se les mueve dentro, viajera por mares extraños de pensamientos solitarios.
Juzgamos las acciones humanas no por lo que son, sino por el disgusto o el placer que nos causan.
Los cambios, aun los mas ansiados, llevan consigo cierta melancolia.