Todo placer languidece cuando no se disfruta en compañía.
El placer más seguro es el menos placentero.
Muchas personas se afanan tanto corriendo detrás del placer, que acaban pasando de largo.
El mejor placer de la vida es hacer lo que la gente te dice que no puedes hacer.
El placer es como ciertas sustancias medicinales: para obtener constantemente los mismos efectos, hay que doblar la dosis, y la última conlleva la muerte o el embrutecimiento.
¿Quieres ser rico? Pues no te afanes en aumentar tus bienes, sino en disminuir tu codicia.
Juzgamos mejores que los placeres muchos dolores porque se consigue para nosotros un placer mayor
Nada es suficiente para quien poco es lo suficiente
La manía de hablar siempre y sobre toda clase de asuntos es una prueba de ignorancia y de mala educación, y uno de los grandes azotes del trato humano
Retírate dentro de ti mismo, sobre todo cuando necesites compañía