El hombre que pretende obrar guiado exclusivamente por la razón está condenado a obrar muy raramente.
Vale más hacer la cosa más insignificante del mundo que estar media hora sin hacer nada.
Los hombres de acción no tienen vida interior y, por lo mismo, no son desgraciados. Nunca es el acontecimiento exterior contrario lo que hace desgraciados a los hombres, sino el alma en pena que se les mueve dentro, viajera por mares extraños de pensamientos solitarios.
Juzgamos las acciones humanas no por lo que son, sino por el disgusto o el placer que nos causan.
Vale más actuar exponiéndose a arrepentirse de ello que arrepentirse de no haber hecho nada.
Te quiero con tu tristeza y tu angustia; para sufrir contigo y no para llevarte a ningún falso reino de la alegría
Déjame agradecerte todo lo que te debo... No rechaces mi devoción, la infinita gratitud que te debo por tu bondad, por el aliento que me das... Por tu perdón
Prefiero equivocarme a ser un artista mediocre, cuyas obras pasen
En el arte la ambigüedad es un factor a favor
El tiempo somos nosotros y no es posible detenerlo