-
Somos ese ser. Los dos nos hemos perdido a nosotros mismos y hemos creado otra cosa, algo que sólo existe como la unión entre los dos. Dios mío, estamos enamorados. De la manera más profunda que es posible enamorarse.
-
Existen muchos impulsos que forman parte de un continuum. Algunos, como la sed o la necesidad de calentarse, no cesan hasta que no se satisfacen. El impulso sexual, el hambre y el instinto maternal, sin embargo, a menudo pueden reorientarse e incluso acallarse con tiempo y esfuerzo. Creo que la experiencia de enamorarse se encuentra en algún punto de este continuum.
-
Hay dos cosas que el hombre no puede ocultar: su embriaguez y su enamoramiento.
-
Enamorarse no es amar. Puede uno enamorarse y odiar.
-
Uno no se enamoró nunca, y ése fue su infierno. Otro, sí, y ésa fue su condena.