-
A menudo cuesta toda una vida librarse de ciertos recuerdos, por muy irrelevantes que sean.
-
Los recuerdos no pueblan nuestra soledad, como suele decirse, antes al contrario, la hacen más profunda.
-
Ella no te necesita. Tiene tu recuerdo, que vale más que tú.
-
Si busco en mis recuerdos los que me han dejado un sabor duradero,
si hago balance de las horas que han valido la pena, siempre me encuentro con aquellas que no me procuraron ninguna fortuna.
-
Nosotros recordamos, naturalmente, lo que nos interesa y porque nos interesa.