En tiempos de engaño universal, decir la verdad se convierte en un acto revolucionario.
La persona más facil de engañar es uno mismo.
Con las manos cansadas, con las piernas cansadas, a tientas por el mundo, me río de que giren las paredes, mas miento, porque estoy llorando.
Somos fácilmente engañados por aquellos a quienes amamos.
El delito de los que nos engañan no está en el engaño, sino en que ya no nos dejan soñar que no nos engañarán nunca.
La soledad es al espíritu lo que la dieta al cuerpo.
Quien todo sabe sufrir, a todo puede atreverse.
Pasión más viva que la amistad es el odio.
La conciencia es la más variable de todas las reglas
La desesperación exagera no sólo nuestra desdicha, sino también nuestra debilidad